jueves, 9 de julio de 2009

Mitos sobre la masturbación

Mitos sobre la masturbación

Los hombres se masturban más. Sergún investigaciones los hombres tienden a exagerar en las encuestas sobre la frecuencia con que acuden al autoerotismo y las mujeres son todo lo contrario; si calculamos bien, los hombres y mujeres lo hacen con una frecuencia similar.

Los hombres empiezan a masturbarse antes que las mujeres. Tampoco es cierto que los hombres se inicien en la masturbación antes que las mujeres por tener un órgano sexual tan “evidente” y que tienen que tocarse a diario por razones fisiológicas e higiénicas.

Está demostrado que hay más mujeres que hombres que se inician en la masturbación antes de los 10 años de edad. Lo hacen así entre el 20% y el 42% de las mujeres, al menos, y entre el 3% y el 13% de los hombres. También hay un 42% a 52% de mujeres que comienzan a hacerlo, como los hombres, durante la adolescencia. Por eso, las mujeres aprenden a masturbarse espontáneamente con mayor frecuencia que los hombres (lo hacen siendo más niñas y sin haber hablado con nadie del tema), quienes suelen iniciarse más tarde, tras hablar con sus compañeros o leer sobre el tema (mujeres: entre el 57% y el 62%; hombres: 28%).

Las personas dejan de masturbarse cuando inician relaciones sexuales. Otra vieja idea, falsa, que se resiste a sucumbir. Lejos de lo que afirma el tópico, los hombres y las mujeres continúan masturbándose después de establecer relaciones de pareja. Incluso aunque tales relaciones sean satisfactorias, el 75% de los varones y el 75% al 91% de las señoras emparejados continúan haciéndolo.

Los que se masturban se aíslan socialmente. No hay nada más incierto que eso. La masturbación no produce aislamiento. Ya se ha comprobado que la mayoría de los seres humanos se masturban y tienen relaciones sexuales sin ser por eso seres aislados.

Lo que sí sucede es lo contrario. Es decir, las personas aisladas que no saben relacionarse con los demás, sólo pueden desarrollar una forma de satisfacción sexual: la masturbación. Pero no porque recurran a ella como consuelo. Se masturban como todos los demás, pero no son capaces de desarrollar la actividad sexual que apetece compartir con otras personas; porque no son capaces de relacionarse con esas personas.

Fuente: http://www.jovenmadre.com/?p=236

1 comentario:

Akhesa dijo...

Abajo los mitos y falsas creencias.
ME encanta el articulo. Mas que nada, porque la gente habla de estas cosas por los bajo, cuando cada uno hace o debe hacer con su vida privada lo que le de la gana.
besitoooossss