martes, 12 de enero de 2010

Domesticando humanos

Si bien se han domesticado todo tipos de animales salvajes, se me ocurre que, directa o indirectamente, el poder domestica humanos día sí y día también.

¿Sómos libres? Lo dudo, todo lo que nos hace libres, es decir, nuestra naturaleza a sido anulada durante siglos por otras personas cuyas egoístas intenciones suelen quedar ocultas bajo un tupido velo reforzadas por varias cortinas de humo que se van renovando con diferentes argumentos.


Parecerá que tengo un mal día o que soy pesimista, etc. La verdad es que no. Me gusta recordarme cada día cómo están las cosas ya que no necesito pensar en lo bonito que es todo para ser feliz. Puedo serlo rebelándome contra lo injusto y a la vez disfrutar de lo bonito que es todo lo demás.

Pensemos por un momento, así a voz de pronto y sin darle muchas vueltas se me ocurren varios ejemplos. Seguro que con vuestros comentarios podríamos llenar varias páginas de ejemplos.

1. Ser salvaje. En nuestra sociedad, éste termino tan natural tiene connotaciones negativas. Cómo si ser salvaje fuera algo brutal y maléfico. Los animales salvajes nos dan lecciones a diario.
2. Leyes: Totalmente a favor de intereses privados y de las clases dominantes.
3. Sistema económico: Trabajar por un sueldo para gastarlo en subsistir, y el que no tiene trabajo que se muera... sin comentarios.
4. Escala de valores: Consumir, envidia, egoísmo...

Es curioso también como la religíon doctrina a los seres humanos. Los hace sumisos ante el poder.
Y sobre la reproducción, quienes más se reproducen son los que menos posibilidades tienen de ser libres. Gente muriendose de hambre, personas sin cultura dominadas por la religión...
Sin embargo, quienes pueden ser "libres" son cuatro gatos, y los que se pasan de libres son aislados o exterminados.

La pirámide se mantiene y se siguen domesticando humanos.

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